Una investigación del Ministerio Público permitió desarticular una organización criminal mexicana que buscaba establecer a Chile como un centro clave para la recepción, acopio y procesamiento de metanfetamina destinada a mercados de Europa y Oceanía.
En el marco de la “Operación Cristales del Pacífico”, realizada ayer, se logró la detención de dos ciudadanos mexicanos y la incautación de 844 kilos de metanfetamina, el mayor decomiso de esta droga en la historia del país. La carga, avaluada en 16,8 millones de dólares para el mercado europeo, podría alcanzar los 160 millones de dólares en Oceanía, debido al alto valor de esta droga en la región.
La indagatoria comenzó en mayo de 2024 bajo la dirección de la Fiscalía Regional de Antofagasta, apoyada por información residual de operaciones internacionales. Según los antecedentes, la droga era enviada desde México diluida en pintura, utilizando el puerto de Manzanillo, controlado por el cartel Jalisco Nueva Generación.
La carga arribó en septiembre a Antofagasta y en diciembre llegó a Valparaíso, oculta en pallets de carga con 36 tinetas de pintura. Posteriormente, la metanfetamina fue trasladada a un laboratorio clandestino en Lolol, en la región de O’Higgins, donde iba a ser procesada y convertida en cristales.
El operativo culminó con la detención de los dos mexicanos en el laboratorio, donde también se decomisó droga en estado líquido y sólido. Los detenidos, presuntos integrantes de una banda internacional, serán formalizados el próximo lunes.
Este golpe al narcotráfico representa un avance significativo en la lucha contra las redes criminales transnacionales que intentan usar a Chile como punto estratégico para sus operaciones ilícitas.
