La naviera china Orient Overseas Container Line (OOCL) anunció que dejará de recalar en la Región del Biobío dentro de su ruta entre Asia y Sudamérica, trasladando su operación al megapuerto de Chancay, en Perú.
La decisión implica que las naves de la compañía ya no arribarán al Puerto Lirquén, en la comuna de Penco, lo que ha generado preocupación en el sector empresarial regional. Ante este escenario, se ha reiterado la necesidad de invertir en infraestructura portuaria nacional para mantener la competitividad de Chile en el comercio marítimo.
Álvaro Ananías, presidente de la CPC en el Biobío, advirtió sobre los efectos de este cambio estratégico. «El uso del puerto de Chancay como hub logístico para buques de mayor capacidad afecta directamente la aspiración de Chile de consolidarse como un centro de transporte portuario en la costa pacífica de Latinoamérica», señaló. Además, recalcó que la modificación en la ruta de OOCL impactará en el volumen de carga transportado por los puertos chilenos.
«Para el Biobío es particularmente relevante porque no solo reduce la cantidad de carga que puede salir de la región, en particular desde el Puerto Lirquén, sino que también afecta el empleo y el desarrollo económico vinculado a la actividad portuaria», agregó Ananías.
La exclusión de Lirquén de la ruta de OOCL es la primera señal concreta del impacto que tendrá la puesta en marcha del megapuerto peruano, lo que deja en evidencia los desafíos que enfrenta Chile en materia de infraestructura portuaria. Ante este panorama, diversos actores del sector han instado a acelerar la inversión en los terminales nacionales para fortalecer su competitividad en la región.