
El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, anunció que el Gobierno pedirá al fiscal nacional, Ángel Valencia, el nombramiento de persecutores especiales en dos regiones para reforzar la investigación de los incendios forestales que podrían haber sido provocados intencionalmente.
La solicitud, coordinada con la ministra del Interior, Carolina Tohá, busca replicar la estrategia implementada en la Región del Maule, donde se designaron fiscales preferentes para abordar estos delitos. La medida fue planteada en el Comité Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid) y tiene como objetivo fortalecer la persecución penal contra los responsables de generar incendios en la temporada estival.
En la Región del Biobío, una de las más afectadas, se reportan 13 incendios activos que han consumido más de 2.700 hectáreas, aunque sin víctimas fatales ni viviendas destruidas. El delegado presidencial de la zona, Eduardo Pacheco, enfatizó la necesidad de capturar a los culpables y llevarlos ante la justicia, advirtiendo que se presentarán acciones legales cuando corresponda.
El jefe de la Defensa Nacional en Biobío, contraalmirante Arturo Oxley, destacó el apoyo de la Subsecretaría de Prevención del Delito en la vigilancia de la zona, con el uso de drones y patrullajes móviles para reforzar la prevención y disuasión de estos siniestros.