El papa Francisco descansó bien durante la noche, según informó este martes la oficina de prensa del Vaticano, tras confirmar que su estado de salud ha presentado una «leve mejoría» y que la insuficiencia renal detectada recientemente «no es preocupante».
En el último parte médico, se detalló que el pontífice, quien lleva 12 días hospitalizado debido a una neumonía bilateral y otras complicaciones, no ha experimentado crisis respiratorias asmáticas y que algunos exámenes de laboratorio muestran signos positivos.
A pesar de su evolución, Francisco continúa bajo terapia de oxígeno, aunque con una reducción leve en los flujos. Los médicos, dada la complejidad de su estado, han decidido mantener el pronóstico reservado.
Mientras sigue su recuperación, el papa retomó algunas tareas y volvió a comunicarse con el párroco de la única parroquia católica en la Franja de Gaza, expresándole su cercanía. En tanto, el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, encabezó un rezo del Rosario en la plaza de San Pedro en su nombre.
