El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó este lunes que la tasa de desocupación en Chile durante el trimestre móvil junio-agosto de 2024 se ubicó en un 8,9%, lo que representa una disminución de 0,1 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior. Este descenso se debió al aumento de la fuerza laboral en un 2,4%, superado ligeramente por el incremento en el número de personas ocupadas, que creció un 2,5%.
Las personas desocupadas aumentaron en un 1,4%, influenciadas principalmente por el incremento en la cantidad de personas cesantes, que registraron un alza del 2,3%. En tanto, las tasas de participación y ocupación registraron un aumento de 0,9 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del año anterior, situándose en 61,8% y 56,3%, respectivamente.
El INE también destacó que la población fuera de la fuerza de trabajo disminuyó un 1,4%, impulsada por la baja en las personas inactivas habituales (-1,3%) y en quienes iniciaban su búsqueda de empleo (-41,2%).
En la Región Metropolitana, la tasa de desocupación fue de 9,2%, con una reducción de 0,4 puntos porcentuales en los últimos doce meses. El empleo en esta región creció un 2,3%, impulsado por los sectores de comercio (4,5%), enseñanza (5,7%) y administración pública (7,6%).
En términos generales, el aumento de la población ocupada en el país fue del 2,5%, reflejado tanto en hombres (2,6%) como en mujeres (2,5%). Los sectores más dinámicos fueron comercio (4,1%), enseñanza (3,8%) y administración pública (3,6%). En cuanto a la categoría ocupacional, el crecimiento se observó en los trabajadores asalariados formales (3,6%) y en los trabajadores por cuenta propia (1,2%).
Por otro lado, la tasa de ocupación informal subió a un 27,6%, con un aumento de 0,9 puntos porcentuales en comparación al mismo periodo del año anterior. El número de personas ocupadas de manera informal creció un 5,9%, impulsado tanto por hombres (5,6%) como por mujeres (6,1%). Los sectores más afectados por este fenómeno fueron el comercio (13,5%) y las actividades de servicios (11,5%), mientras que la informalidad laboral se observó especialmente entre los trabajadores por cuenta propia (9,5%) y empleadores (51,8%).