Este martes, la Cámara de Diputadas y Diputados rechazó la acusación constitucional presentada en contra del ministro de la Corte Suprema, Jean Pierre Matus, vinculado al controvertido «caso audios», un escándalo que ha remecido el ámbito político y judicial en el país. El caso involucra al abogado penalista Luis Hermosilla como figura central.
El libelo, impulsado por el oficialismo y la Democracia Cristiana, acusaba a Matus de notable abandono de deberes y se estructuraba en tres capítulos. El primero señalaba que el magistrado faltó a la verdad al negar públicamente vínculos con Hermosilla, aunque posteriormente se demostró que sí existían. El segundo capítulo lo acusaba de no haber incluido a Hermosilla y al exministro Andrés Chadwick en su lista de inhabilidades. Por último, se le acusaba de transgredir el principio de imparcialidad al utilizar la expresión «ni perdón ni olvido» en un chat con Hermosilla, refiriéndose a las dificultades enfrentadas para ser ratificado en la Corte Suprema.
Durante su intervención en la Cámara, Matus negó las acusaciones y aclaró que no intentó engañar a los parlamentarios ni a la opinión pública. Admitió, sin embargo, haberse equivocado en algunos detalles sobre su comunicación con Hermosilla, pero negó que éste haya influido en su nombramiento.
Tras más de dos horas de debate, la acusación obtuvo 66 votos a favor, 54 en contra y 14 abstenciones, quedando rechazada. Gracias a las abstenciones, Matus evitó ser destituido de su cargo en la Corte Suprema e inhabilitado por cinco años para ejercer funciones públicas.
