En enero de 2025 se aplicará en Chile la última de las cuatro alzas consecutivas en las tarifas eléctricas, culminando un incremento acumulado que ha generado preocupación entre los consumidores. Desde el descongelamiento de las tarifas, iniciado a mediados de 2024, los hogares han experimentado un aumento que supera el 50%, aunque algunos expertos estiman que podría llegar al 60%.
El último informe técnico preliminar de la Comisión Nacional de Energía, emitido en noviembre, proyectó un aumento promedio cercano al 10% para los consumidores residenciales que consumen menos de 350 kWh mensuales. No obstante, las variaciones entre regiones serán notorias. Valparaíso liderará con un incremento estimado del 17%, seguido de la Región Metropolitana con un 13%, mientras que Ñuble, Los Ríos y Antofagasta experimentarán alzas entre el 6% y el 9%.
En cifras concretas, una familia de Valparaíso que pagaba $39.000 en mayo de 2024 verá un salto en su cuenta mensual a aproximadamente $68.864 en enero de 2025. Este ajuste supera las proyecciones iniciales y refleja el impacto acumulativo de las medidas aplicadas tras el descongelamiento tarifario.
Expertos como Humberto Verdejo, de la Universidad de Santiago, y Javier Piedra, de la Fundación Energía Para Todos, coinciden en que el alza acumulada se ha convertido en una de las más significativas de los últimos años, poniendo en evidencia la necesidad de políticas energéticas que mitiguen el impacto en los hogares más vulnerables.
