El Comité de Ministros decidió rechazar nuevamente el megaproyecto Dominga, de la empresa Andes Iron, en medio de una extensa tramitación; en una decisión fue tomada por los subsecretarios de Salud, Economía, Energía, Minería y el jefe de gabinete de la subsecretaría de Agricultura, bajo la presidencia del jefe de la División Jurídica del Ministerio de Medio Ambiente.
Este proyecto lleva 11 años en tramitación, siendo rechazado en dos ocasiones por el Comité de Ministros (en 2017 y 2023); pero según adelantó la empresa, volverá a la justicia para lograr «restablecer el Estado de Derecho».
«La actuación del Comité de Ministros marca un nefasto precedente nunca visto en la historia de Chile en materia de tramitación ambiental. Resulta inadmisible que el Poder Ejecutivo incumpla por segunda vez una sentencia judicial en el mismo caso», dijo Andes Iron.
En una declaración pública, la firma agregó que la deteminación de esta jornada «violenta en forma y fondo la sentencia dictada el pasado 9 de diciembre por el Primer Tribunal Ambiental de Antofagasta, al ignorar sus directrices, además de contener vicios profundos», llegando a una resolución «ilegal e inconstitucional».
Detalles de la resolución
El Comité de Ministros precisó que se analizaron los fundamentos técnicos de las reclamaciones ciudadanas, teniendo en consideración lo dispuesto en la sentencia del Primer Tribunal Ambiental, de fecha 9 de diciembre del año 2024.
En base a estos antecedentes, se acogieron las reclamaciones debido a dos puntos específicos: La exclusión de pronunciamientos sobre biodiversidad y el insuficiente plan de contingencia y emergencia.
En el primer punto, manifestaron que «se excluyeron indebidamente las observaciones de la Conaf, que en múltiples ocasiones a lo largo de la evaluación relevan la falta de información de las especies endémicas como la Krameria cistoidea (pacul) y la Balsamocarpon brevifolium (algarrobilla, en peligro de extinción), ambas presentes en el área mina del proyecto y que es una fuente de alimentación y hábitat para el tricahue, especie en peligro de extinción».
Sobre los planes, el Comité «constató que el plan de prevención de contingencias y emergencias del proyecto no es suficiente para hacerse cargo del riesgo de derrame de hidrocarburos. Además, tampoco considera un plan de prevención de contingencias y emergencias para vertimientos de concentrados de hierro en el transporte marítimo».
Satisfacción entre ambientalistas
El abogado Ezio Costa, de la ONG Oceana, destacó que «hay una decena de argumentos por los que este proyecto tenía que rechazarse (…) los procedimientos judiciales siguen y vamos a tener que ver la resolución y luego dar las discusiones que correspondan en los tribunales. Eso es parte de este asunto y es una lástima, creo que el proyecto Dominga debería renunciar y dejar de tratar de imponer un proyecto fallido».
En contraste, una vecina de La Higuera, que se manifestó a favor del proyecto, lamentó la decisión y dijo que «necesitamos una real inversión (…) tenemos que decidir si tomar agua, si tomar té o bañarnos. ¿Por qué el Presidente sigue riéndose de nosotros? ¿Por qué no cumple o acata la ley chilena?».
«Para nosotros significa una gran decepción de nuestro país, de nuestro Presidente (…) nosotros todavía nos sentamos en pozos negros en la comuna de La Higuera, eso el Presidente lo sabe y lo ignora», cuestionó.
En tanto, la ONG Greenpeace consideró que «este tercer rechazo confirma, una vez más, que se trata de un proyecto inviable por el grave riesgo que significa para la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt y sus alrededores, una de las áreas protegidas más importantes del norte de Chile».
«En más de 10 años de tramitación, Dominga ha sido sistemáticamente rechazado por razones técnicas: Desde el inicio, la empresa no logró responder a todos los elementos requeridos para la evaluación del proyecto, presentó información insuficiente en su línea base, no realizó una correcta evaluación sinérgica de los impactos en la flora y fauna local, y subestimó los impactos en aves de la zona, especialmente del pingüino de Humboldt. En este tiempo, además, la línea base del proyecto quedó obsoleta frente a la nueva realidad ambiental», aseguró.