El Manchester City atraviesa uno de los momentos más complicados de su historia reciente, acumulando ocho derrotas en los últimos 11 encuentros. La situación alcanzó un punto crítico tras perder ante su eterno rival, el Manchester United, en un polémico encuentro que expuso graves fallos tácticos y desconcentraciones.
En el derbi, los dirigidos por Pep Guardiola ganaban 1-0 hasta el minuto 87. Sin embargo, un penal insólito permitió al United igualar el marcador, y poco después, un gol de Diallo selló la remontada de los ‘Diablos Rojos’. Este resultado dejó al descubierto fracturas internas en el vestuario, exacerbadas por las explosivas declaraciones de Bernardo Silva.
El mediocampista portugués, visiblemente molesto, criticó con dureza las decisiones tomadas en los minutos finales. «Si tomas este tipo de decisiones estúpidas cuando faltan tres o cuatro minutos para el final, mereces pagar por ello», declaró a Sky Sports. Además, lamentó que estas situaciones no sean aisladas: «No es un partido, son muchos partidos últimamente. Hoy jugamos los últimos minutos como un Sub 15».
Por su parte, Pep Guardiola no ocultó su frustración. Reconoció que el equipo no está jugando con la solidez habitual y asumió la responsabilidad por la mala racha. «No hemos perdido ocho partidos en dos temporadas, y ahora lo hemos hecho en unas semanas. Es inaceptable. Soy el entrenador, el que manda aquí, y no estoy haciendo bien las cosas. Esa es la única verdad».
La crisis ha generado preocupación entre los aficionados y la directiva, quienes esperan una reacción inmediata de un equipo acostumbrado a ser protagonista en todas las competiciones. Con desafíos cruciales en el horizonte, el Manchester City enfrenta la necesidad urgente de encontrar respuestas para evitar que esta temporada se convierta en una de las peores de su historia.
