
Yolanda Saldívar, condenada a cadena perpetua por el asesinato de la cantante Selena Quintanilla en 1995, sostiene que ha cumplido su sentencia y debería quedar en libertad. A sus 62 años, asegura sentirse como una “prisionera política” y reafirma su versión de que el disparo que terminó con la vida de la artista fue accidental.
Un familiar de Saldívar, cuya identidad no fue revelada, declaró al The New York Post que la mujer considera haber pagado “suficiente” por su delito y está lista para salir de prisión. “Ella siente que es una prisionera política en este momento. Ella cree que ha cumplido con creces su condena”, señaló la fuente.
Hace algunos días, en el documental Selena y Yolanda: Los secretos entre ellas, transmitido por Peacock, Saldívar afirmó que fue “condenada por la opinión pública antes de que comenzara el juicio”.
De admiradora a asesina de Selena
Saldívar, quien comenzó como una ferviente fan de Selena, llegó a convertirse en su socia y administradora de negocios. Sin embargo, la relación se fracturó cuando la cantante descubrió que su colaboradora habría malversado 60.000 dólares de sus tiendas y tenía la intención de despedirla.
El 31 de marzo de 1995, tras un enfrentamiento en un hotel de Corpus Christi, Texas, Saldívar disparó a Selena, quien murió desangrada. La condenada insiste en que el disparo fue accidental y que, en realidad, planeaba quitarse la vida antes de ser persuadida por la policía para rendirse.
Ahora, con la posibilidad de optar a la libertad condicional en marzo de 2025, Saldívar sigue negando la malversación de fondos y sostiene que el dinero fue usado para comprar boletos de avión a Selena, quien presuntamente visitaba a un cirujano en Miami.
Hasta el momento, la familia de la cantante no ha emitido declaraciones sobre el caso, aunque en ocasiones previas el padre de Selena ha manifestado su desconfianza en las afirmaciones de Saldívar.