El año 2024 ha sido el más cálido documentado desde que existen registros, marcando un hito al ser el primero en el que la temperatura media global superó en 1,5 °C los niveles preindustriales. Este dato fue confirmado por el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S), el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea. Según los informes, la temperatura media del aire en superficie alcanzó los 15,10 °C, lo que representa un incremento de 0,72 °C respecto al promedio de 1991-2020 y de 0,12 °C más que en 2023, el anterior año más cálido.
El 2024 también ha destacado por ser un año con temperaturas excepcionalmente altas durante casi todo el año. Desde enero hasta junio, todos los meses fueron más cálidos que en cualquier otro año previo, y de julio a diciembre, los meses fueron los segundos más cálidos registrados, solo por detrás de 2023. Agosto de 2024 empató con el de 2023 como el más cálido de todos los tiempos.
Las consecuencias de este aumento de temperatura se han manifestado en olas de calor sin precedentes y lluvias torrenciales, afectando a millones de personas. La combinación de altas temperaturas globales y niveles récord de vapor de agua en la atmósfera ha exacerbado fenómenos climáticos extremos, como tormentas y ciclones tropicales.
La temperatura en Europa también alcanzó cifras históricas, con una media de 10,69 °C, 1,47 °C más alta que el promedio entre 1991 y 2020, estableciendo un nuevo récord. Además, la superficie del mar sobre los océanos alcanzó una temperatura media histórica de 20,87 °C, lo que ha influido en la prevalencia de las altas temperaturas globales.
Este récord de temperatura y la humedad sin precedentes están contribuyendo al estrés térmico en varias regiones, afectando a la salud humana y animal, mientras que los incendios forestales se han incrementado, especialmente en América, con niveles de emisión de carbono sin precedentes en países como Bolivia y Venezuela.
