Un ataque con misiles perpetrado por Rusia en el centro de la ciudad de Sumi, en el noreste de Ucrania, dejó al menos 24 personas muertas, entre ellas un niño, y más de 80 heridas, incluidos siete menores, según reportó el Servicio Estatal de Emergencias (DSNS).
El bombardeo, que se produjo durante la celebración del Domingo de Ramos, afectó a transeúntes, automovilistas, pasajeros de transporte público y residentes en sus hogares. Las autoridades locales informaron que Rusia lanzó dos misiles balísticos contra el centro urbano, generando destrucción y caos en plena festividad religiosa.
El jefe de la Administración Militar Regional de Sumi, Volodímir Artiuj, confirmó el tipo de armamento utilizado, mientras que el alcalde en funciones de la ciudad, Artem Kobzar, lamentó la tragedia en una jornada significativa para la comunidad local.
«Hubo heridos en plena calle, en coches, transportes públicos y casas», detalló el DSNS, que coordina las labores de rescate. En el lugar se encuentran investigadores y peritos forenses recogiendo evidencia para documentar lo que califican como un crimen de guerra cometido contra la población civil.
Las tareas de búsqueda y asistencia continúan en medio de la conmoción generada por uno de los ataques más mortíferos en la región en lo que va del año.
