El destacado escritor peruano y Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, falleció este domingo en Lima a los 89 años, según confirmó su familia mediante un comunicado difundido por su hijo Álvaro Vargas Llosa en redes sociales.
«Con profundo dolor, hacemos público que nuestro padre, Mario Vargas Llosa, ha fallecido hoy en Lima, rodeado de su familia y en paz», señala la declaración firmada por sus hijos Álvaro, Gonzalo y Morgana Vargas Llosa.
En el mensaje, la familia destacó que el autor de La ciudad y los perros “gozó de una vida larga, múltiple y fructífera” y que “deja detrás suyo una obra que lo sobrevivirá”.
Siguiendo su voluntad, no se realizarán actos públicos y sus restos serán incinerados.
El legado de una figura clave en la literatura hispanoamericana
La muerte de Mario Vargas Llosa marca el cierre de un capítulo fundamental en la historia de la literatura en español. Figura central del denominado “Boom Latinoamericano”, su obra fue traducida a más de treinta idiomas y dejó una profunda huella en generaciones de escritores alrededor del mundo.
Entre sus títulos más influyentes se encuentran Conversación en La Catedral, La casa verde, La tía Julia y el escribidor y La fiesta del Chivo.
En 2010 fue distinguido con el Premio Nobel de Literatura por su “cartografía de las estructuras del poder y sus mordaces imágenes de la resistencia del individuo, su rebelión y su derrota”, según señaló entonces la Academia Sueca.
Durante su discurso de aceptación, el autor reafirmó su creencia en la literatura como una herramienta de libertad y transformación. “La literatura es fuego, es protesta, es rebeldía. Es una forma de defensa de la dignidad humana”, afirmó en esa ocasión.
Una despedida íntima
La familia pidió respeto por su privacidad y reiteró que los deseos del escritor serán respetados sin excepciones. “Nuestra madre, nuestros hijos y nosotros mismos confiamos en tener el espacio y la privacidad para despedirlo en familia y en compañía de amigos cercanos”, concluyeron en el comunicado.
