La Guardia Costera taiwanesa ha desplegado varios barcos patrulleros este lunes en respuesta a la presencia de buques chinos en las inmediaciones de la isla, horas después de que China anunciara una nueva ronda de ejercicios militares denominados Joint Sword-2024B. Estas maniobras incluyen simulaciones de bloqueo y control de áreas estratégicas de Taiwán, en un escenario de creciente tensión.
En un comunicado, la Guardia Costera de Taiwán denunció las «acciones intimidatorias y amenazantes» de China, que impactan gravemente la paz en el estrecho de Taiwán y la estabilidad regional. Además, destacó que se ha establecido un centro de respuesta para coordinar la vigilancia junto con el Ministerio de Defensa Nacional, con el fin de defender las fronteras marítimas y la soberanía nacional.
China, a través de su Guardia Costera, afirmó que las patrullas en la zona se realizan en virtud del principio de «una sola China» y también llevó a cabo inspecciones en el archipiélago de Matsu, controlado por Taiwán. Estas maniobras, según el Consejo de Asuntos Continentales de Taiwán, buscan socavar la seguridad de la región y alterar el statu quo.
Este es el quinto ejercicio militar chino de este tipo desde 2022, lo que refleja la escalada en las tensiones entre Taiwán y China, que reclama la soberanía sobre la isla.