Tras varios meses de deliberaciones, la Comisión de Constitución del Senado ha despachado el proyecto de ley que busca fortalecer el Ministerio Público. Esta iniciativa, además de aumentar la dotación de fiscales, otorga nuevas atribuciones al fiscal nacional, permitiéndole establecer directrices específicas para los fiscales regionales, con el objetivo de unificar criterios en la persecución criminal.
La senadora de la UDI, Luz Ebensperger, subrayó que, aunque los fiscales regionales podrán oponerse a las instrucciones del fiscal nacional, este último será quien tenga la última palabra en caso de discrepancias. «Creo que se avanza en permitir que el fiscal nacional tenga la atribución de entregar instrucciones particulares para que haya una unificación de criterio en la persecución criminal a los fiscales regionales», comentó Ebensperger.
Por otro lado, la senadora del Partido Comunista, Claudia Pascual, expresó su preocupación por la concentración de poder en el cargo de fiscal nacional, señalando la necesidad de incorporar contrapesos adecuados para evitar un fortalecimiento excesivo de su autoridad. Pascual destacó su inquietud sobre el proyecto al considerar que “se ha robustecido sin contrapesos o con contrapesos más débiles la autoridad del fiscal nacional”.
El proyecto ahora deberá ser revisado por la Comisión de Hacienda, donde se analizarán los costos asociados a la incorporación de 819 nuevos cargos en el Ministerio Público, que incluyen cuatro jefes de unidad, 205 fiscales adjuntos, 337 profesionales, 118 técnicos, 150 administrativos y cinco auxiliares, los cuales serán contratados en un periodo de cuatro años.