El pasado viernes, padre e hijo implicados en el millonario robo a la empresa Brinks, ocurrido a mediados del mes anterior, fueron reformalizados en Rancagua por los delitos de porte y tenencia ilegal de armas y municiones. La Policía descubrió una pistola, un cargador y 158 miguelitos enterrados en el patio de una vivienda de la Región de O’Higgins, lo que llevó a la nueva acusación.
El fiscal jefe de Análisis Criminal, Carlos Fuentes, explicó que, además de los cargos de robo y asociación criminal, se sumó este nuevo delito tras la ocultación de los elementos mencionados. El hallazgo se realizó tras recibir información clave y obtener la autorización correspondiente para registrar el domicilio.
Además, se acusa a los imputados de haber facilitado un galpón para esconder un furgón que transportaba el botín de 11.500 millones de pesos. En paralelo, el defensor público Leonardo Díaz, quien representa a otros dos implicados, solicitó la revisión de sus medidas cautelares, insistiendo en que estos individuos son solo encubridores y aportando nuevos antecedentes para probar su inocencia.
Por su parte, la Fiscalía también anunció la reformalización de cuatro reclusos por tenencia ilegal de elementos prohibidos, tras el hallazgo de celulares y dinero en efectivo en la cárcel de Rancagua.
