La Fiscalía de Rengo formalizó y obtuvo la prisión preventiva de tres personas acusadas de participar en la trata de una niña boliviana de ocho años, quien fue vendida por su abuela por 350 mil pesos a un matrimonio que posteriormente la obligó a realizar labores domésticas en condiciones de explotación en la comuna de Rengo, Región de O’Higgins.
El caso fue revelado a través de un reportaje de T13, el cual detalla que la transacción se realizó en Bolivia, donde la pareja residía cerca de la familia de la menor. Posteriormente, la niña fue ingresada de forma irregular a Chile, exponiéndola a condiciones climáticas extremas durante su traslado.
El subprefecto Cristián Pacheco, subjefe de la Brigada Investigadora de Trata de Personas de la PDI, informó que los responsables se establecieron en un campamento en Rengo, donde la menor era castigada con prácticas como dormir a la intemperie y se le negaba alimentación cuando no cumplía con las tareas del hogar impuestas por sus captores.
La situación fue descubierta en 2024, tras una denuncia por presunta desgracia o secuestro que permitió a Carabineros ubicar a la menor en Santiago. En febrero se confirmó que la niña había sido vendida por su abuela.
El fiscal jefe de Rengo, Osvaldo Yáñez, precisó que según los psicólogos que acompañan a la menor, la supuesta intención de la abuela era que la niña recibiera educación en Chile, lo que nunca ocurrió. En cambio, fue forzada a trabajar sin acceso a salud ni educación.
“La investigación tiene la relevancia de mostrar que aún existen casos que parecen sacados de una historia de ficción, pero que todavía ocurren”, señaló el fiscal.
Los tres imputados fueron formalizados por trata de personas con fines de servidumbre y explotación laboral, y se encuentran en prisión preventiva. De ser condenados, arriesgan penas de hasta 10 años de cárcel.
