La diputada Maite Orsini enfrenta nuevas críticas tras conocerse que se comunicó con la fiscal Lorena Parra, encargada de la investigación por violación contra Jorge Valdivia, su expareja. Orsini, mediante un mensaje de WhatsApp, consultó a la persecutora sobre una eventual indagación por las filtraciones del caso, acción que ha sido cuestionada tanto por el Gobierno como por su propio partido, el Frente Amplio.
Según trascendidos, Orsini obtuvo el contacto de Parra durante una declaración como testigo, generando dudas sobre la ética de su proceder. La ministra de la Mujer, Antonia Orellana, calificó la intervención como «más allá de lo prudente» y destacó que las autoridades públicas tienen el deber de actuar con imparcialidad, especialmente en casos de delitos sexuales, por el impacto que estas acciones pueden tener en las víctimas.
El Frente Amplio, a través de su dirección regional, presentó una denuncia ante los tribunales internos del partido para evaluar las acciones de Orsini. Desde la dirección nacional, Andrés Couble señaló que investigarán los antecedentes para determinar si su conducta contraviene los principios partidarios y si ha comprometido las garantías de las víctimas.
El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, subrayó la importancia de que la Fiscalía y los tribunales aclaren cualquier posible irregularidad, enfatizando que nadie está por sobre la ley. Este incidente se suma a un antecedente de marzo de 2023, cuando Orsini llamó a una general de Carabineros para intervenir en un procedimiento contra Valdivia, lo que le valió una sanción de la Comisión de Ética de la Cámara de Diputados.
El caso sigue generando tensiones tanto en el ámbito político como en el judicial, con repercusiones en la confianza hacia las instituciones y los procedimientos en curso.