
El Gobierno informó este miércoles que interpondrá una querella luego del ataque con perdigones sufrido por un helicóptero de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) mientras realizaba labores de abastecimiento de agua para combatir incendios forestales en la comuna de Collipulli, Región de La Araucanía.
El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, condenó enérgicamente lo ocurrido, detallando que la aeronave fue atacada en la localidad de Curaco, un sector rural donde residen agricultores y comunidades mapuche, algunas de ellas consideradas radicalizadas. Afortunadamente, la tripulación no sufrió lesiones.
Valenzuela enfatizó que este tipo de hechos no pueden quedar impunes, ya que ponen en riesgo vidas humanas y dificultan el trabajo de los brigadistas y equipos de emergencia. En esa línea, confirmó que el Ejecutivo tomará acciones legales para identificar y sancionar a los responsables.
Por su parte, el subsecretario del Interior, Luis Cordero, comparó el ataque con disparar a una ambulancia y, aunque descartó por ahora la aplicación de la Ley Antiterrorista, señaló que su uso no está excluido si se reúnen los antecedentes necesarios. Además, recordó que el Código Penal, la Ley de Armas y la Ley de Seguridad del Estado están vigentes y podrían aplicarse en caso de que la situación se repita o se agrave.
Cordero recalcó que actos como este no solo infringen la ley, sino que también obstaculizan los esfuerzos para contener los incendios forestales que afectan a la región.