El Senado aprobó este miércoles la actualización del acuerdo comercial entre Chile y la Unión Europea, el cual regía las relaciones bilaterales desde 2003. Esta modernización quedó lista para su promulgación oficial, consolidando una alianza estratégica y multisectorial entre ambas partes.
El canciller Alberto van Klaveren destacó que el acuerdo «consolida una relación política que cobra especial vigencia en el actual contexto internacional». Además, subrayó que la Unión Europea representa para Chile un socio estratégico con afinidades que van más allá de lo económico, abarcando aspectos políticos, culturales y de políticas públicas.
El renovado acuerdo busca que la Unión Europea diversifique su acceso a materias primas críticas para la transición ecológica, como el litio, lo que reduciría su dependencia de China. Actualmente, la UE es el mayor inversor extranjero en Chile y el cuarto socio comercial. En 2023, el intercambio bilateral alcanzó los 18.517 millones de dólares, con un crecimiento anual promedio de 4,5%, de acuerdo con el Banco Central.
Con este tratado, el 99,6% de los productos chilenos estarán sujetos a algún tipo de rebaja arancelaria en el mercado europeo. Para su plena vigencia, el Acuerdo Marco Avanzado (AMA) debe ser ratificado por todos los Estados Miembros de la Unión Europea; sin embargo, inicialmente entrará en vigor un acuerdo interino que solo requiere el consentimiento del Parlamento Europeo, obtenido en febrero de este año.