El Banco Central de Chile presentó este miércoles su último Informe de Política Monetaria (IPoM) del 2024, entregando un diagnóstico actualizado sobre el panorama económico nacional. El documento destaca que la inflación se encuentra por encima de lo anticipado hace unos meses, atribuyéndolo a una combinación de factores internos y externos, y proyecta que esta alcanzará la meta del 3% recién a inicios de 2026.
En términos de crecimiento económico, el informe señala que la actividad mostró un comportamiento dinámico durante el primer trimestre del año, estabilizándose en los meses siguientes. Se espera que el Producto Interno Bruto (PIB) crezca un 2,3% en 2024, una cifra que, según el instituto emisor, está alineada con la capacidad productiva del país. Para los años 2025 y 2026, el Banco proyecta un crecimiento económico moderado, en un rango estimado entre 1,5% y 2,5%, con un impulso relevante del sector minero, aunque con una menor contribución de la demanda interna.
Inflación: un desafío persistente
El informe subraya que la inflación sigue siendo un desafío clave. En noviembre, la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue de 4,2%, y se espera que el año cierre en torno al 4,8%. Durante la primera mitad de 2025, la inflación fluctuaría cerca del 5%, influida por la apreciación global del dólar, que ha elevado el tipo de cambio, y por el aumento de los costos laborales en el país.
El Banco Central explica que estos factores han estrechado los márgenes operativos de las empresas, lo que ha llevado a un traspaso de costos a los precios finales mayor al previsto. A mediano plazo, se espera que las presiones de costos disminuyan, mientras la evolución de la inflación dependerá en gran medida de la demanda interna, en particular del consumo de los hogares.
En este contexto, se destaca que el consumo se ha mantenido prácticamente plano durante el segundo y tercer trimestre de 2024, en un escenario marcado por la lenta creación de empleo, la depreciación real del peso y las expectativas pesimistas de los consumidores.
Ajustes en la política monetaria
En su reunión del martes, el Consejo del Banco Central decidió reducir la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 25 puntos base, llevándola de 5,25% a 5%. Esta fue la última decisión de política monetaria del año y se alinea con las expectativas del mercado.
El instituto emisor explicó que esta medida responde a un escenario inflacionario más complejo en el corto plazo, con presiones de costos más altas de lo esperado. Según las proyecciones del IPoM, la inflación permanecerá elevada en el primer semestre de 2025 antes de iniciar una trayectoria descendente más clara.
El Consejo del Banco Central advirtió que el balance de riesgos para la inflación está sesgado al alza, lo que exige cautela al momento de considerar nuevas reducciones en la TPM. Por ello, el organismo seguirá evaluando la marcha de la economía para determinar el momento adecuado para futuros ajustes.
Perspectivas económicas
En general, el Banco Central mantiene una visión moderada respecto del desempeño económico de Chile en el mediano plazo. Aunque el crecimiento proyectado para 2024 se encuentra en un nivel saludable, las expectativas para los años siguientes reflejan un escenario de mayor incertidumbre, condicionado por factores como la lenta recuperación del consumo, el débil dinamismo del mercado laboral y la persistencia de desafíos globales.
A pesar de estos obstáculos, el IPoM destaca el papel del sector minero como motor de crecimiento en los próximos años, lo que podría mitigar parcialmente el impacto de una demanda interna más débil. Sin embargo, el informe advierte que el panorama económico requerirá un monitoreo constante, especialmente en lo referente a los riesgos inflacionarios y las condiciones financieras internacionales.
De esta manera, el Banco Central finaliza el 2024 con un llamado a la cautela, destacando la necesidad de tomar decisiones de política económica basadas en una evaluación rigurosa de los datos disponibles y en un contexto de alta volatilidad global.
