El Gobierno de Chile lamentó profundamente la tragedia que ha golpeado a la ciudad de Valencia, en España, donde fuertes inundaciones han dejado más de 70 personas fallecidas y numerosos desaparecidos. En un comunicado oficial, la administración del Presidente Gabriel Boric expresó su «solidaridad al Gobierno y al pueblo de España» por los desastrosos efectos del temporal de «dana» o «gota fría», que provocó cuantiosas pérdidas humanas y daños materiales en la región.
El Ejecutivo chileno subrayó la importancia de tomar conciencia sobre el cambio climático, apuntando que «este fenómeno de la naturaleza, influenciado por el aumento de la temperatura en el Mediterráneo, nos recuerda la urgente necesidad de concertar acciones que permitan contrarrestar los efectos del cambio climático». En este sentido, Chile hizo un llamado a la cooperación global para reducir el impacto de fenómenos meteorológicos cada vez más extremos.
Las escenas en Valencia han sido descritas como la «peor catástrofe del siglo», comparándose con la devastación de un tsunami, ya que la fuerza de las aguas arrastró vehículos y causó grandes bloqueos en las rutas. Las autoridades locales trabajan en el levantamiento e identificación de víctimas, mientras las carreteras permanecen colapsadas y muchas personas aún esperan ser rescatadas. El Gobierno de Chile extendió sus condolencias a los familiares de las víctimas y a las comunidades afectadas en esta dolorosa jornada.
