La dificultad para dormir es un problema común que podría encontrar una solución natural en la piña, una fruta que actúa como inductor del sueño gracias a su contenido de melatonina, sustancia que el cuerpo produce naturalmente para regular el ciclo sueño-vigilia.
Según la Clínica Mayo, la melatonina ayuda a sincronizar el ritmo circadiano. La piña, además de este beneficio, es rica en vitamina C, potasio, magnesio, antioxidantes y fibra. De acuerdo con el Ministerio de Agricultura de Argentina, una piña bien madura contiene un 11% de hidratos de carbono y destaca por su aporte de yodo, además de otros minerales como hierro.
Un estudio publicado en la revista Journal of Pineal Research, que evaluó el consumo de frutas en 12 voluntarios, reveló que la piña puede aumentar hasta tres veces los niveles de melatonina en comparación con otras frutas. Esto sugiere que consumir piña podría ser una opción efectiva para apoyar el descanso nocturno.
“La melatonina no genera sueño instantáneamente, pero contribuye a restablecer el ritmo circadiano”, señaló la nutricionista Keri Glassman. Este efecto ayuda al cuerpo a reconocer cuándo es el momento adecuado para dormir.
Precaución con el exceso de melatonina
Aunque la melatonina en la piña es una alternativa natural, su consumo en suplementos debe ser moderado. Especialistas recomiendan estos productos solo como tratamientos a corto plazo para problemas específicos, como insomnio o desfase horario.
El neurólogo Álvaro Vidal advierte sobre el abuso de esta hormona debido a la desinformación y su uso masivo, lo que podría generar efectos adversos aún poco estudiados a largo plazo. Por ello, optar por fuentes naturales, como la piña, es una forma segura de disfrutar de los beneficios de la melatonina sin riesgos asociados.